Al pueblo de Regumiel de la Sierra por sus fiestas patronales de San Adrián Mártir.

    En estos días de fiesta, alegría, gozo, nuestro mayor deseo es que las vivamos con plenitud, en convivencia entrañable que nos lleve a disfrutarlas en paz y respeto con el amigo, vecino, visitante ...

    Convivencia, que nos dará la sana alegría, de la verdadera tiesta en la que cantamos y festejamos a nuestro patrón San Adrián, para que él también se sienta feliz con nosotros no sólo estos días, sino durante todo el año.

    Es un honor y responsabilidad, el pronunciar el pregón de fiestas; no os diré grandes cosas, ni con hermosas palabras, pero sí os lo digo de corazón. Somos así los castellanos, los serranos, nobles y sinceros, con cariño.

    Que gocemos y estemos orgullosos de estas tierras, montañosas, frías, sanas, con una gran riqueza que podemos y debemos disfrutar y cuidar. Para poder ofrecérselas a nuestros sucesores como un gran tesoro, algo muy hermoso que se puede perfeccionar con nuestros comportamientos cordiales; buscando siempre lo mejor de nosotros y compartirlo con todos los de aquí y los que llegan.

    Desde hace años, muchos años, nuestros antepasados ya vivían estos días con júbilo, pasando la antorcha de su alegría de generación en generación hasta nosotros.

    Seamos agradecidos con ellos, con los que nos sucedan dejando muy alta la meta de la vivencia que nos ofrece este programa de festejos.

    Conozco poco a los más jóvenes, a personas mayores no a todas, pero por mi trabajo como maestra durante 20 años compartí con vosotros codo a codo, muy de cerca, tiempo, esfuerzo, ilusiones, metas con momentos de verdadera alegría, algunos muy gratos y otros difíciles, como es en sí la vida humana. Los ideales son como las estrellas, no llegamos a alcanzarlos pero iluminan nuestras vidas. De aquellos niños recordamos a algunos que nos dejaron, muchos otros son hoy padres, abuelos, personas responsables en muchos campos de trabajo, aquí y lejos de aquí a donde han llegado con esfuerzo y constancia, recordemos estos valores aprendidos de niños.

    De esos años quisiera dedicar un recuerdo especial a todos los compañeros, a Don Blas Castañeda, Don Augusto Cortiñas, a los que siempre les sentí dispuestos a ayudar y participar en todo.

    Toda mi familia se siente orgullosa de éste rincón serrano, con el que estamos enraizados por la escuela, amigos, vecinos ... y estamos muy agradecidos, pues en los duros y difíciles momentos de la pérdida de nuestro querido ENRIQUE, os sentimos unidos a nosotros en el acompañamiento, y amigos y muchas otras personas, de mil maneras, nos mostrasteis ayuda, apoyo, consuelo, ... y en representación de 105 nobles sentimientos de 105 Zumelinos, el Ayuntamiento organizó la exposición Memorial de Enrique con fotos que él había realizado. Fotos y recuerdos en los que buscaba siempre lo mejor, lo más bonito. La naturaleza, muchas veces difícil, las fiestas (mayos de los mozos, carrozas), rincones escondidos y entrañables, buscando en ellos la paz, la grandeza de Dios y el disfrute de lo bello.    

    Por todo gracias y que éstas, nuestras fiestas de San Adrián, sean muy felices.

¡ VIVA SAN ADRIÁN !

¡ VIVA REGUMIEL !

Carmen de Pedro 'Tablado